No podemos pasar sin ellas y cambian en un momento el aspecto del baño, pero ¿sabemos cómo cuidar las toallas de baño?
Elegirlas bien
Antes de saber cómo cuidar las toallas, debemos tener unos conceptos claros a la hora de comprarlas. Por ejemplo, las toallas más suaves y naturales son aquellas que son 100% algodón. Además, si optamos por comprar tejidos naturales evitaremos posibles alergias y nos durarán más. También nos debemos fijar en el volumen de la toalla, a más grosor mayor capacidad de absorción.
En cuanto al elemento decorativo de las toallas cada uno es libre de elegir la que quiera, ¡por supuesto!, pero es cierto que el blanco es una garantía de éxito por la sensación de limpieza y frescor.
Si por el contrario queremos energía después de la ducha optaremos por colores brillantes como naranja, verde lima o fucsia. El azul o los verdes más apagados transmiten sensaciones de tranquilidad y armonía.
¿Cómo cuidarlas?
Para mantener las toallas en las mejor condiciones debemos cambiarlas una vez por semana. Si ocupan suficiente espacio como para poner una lavadora, ¡hazlo!. Lo pero que le pueden pasar es acumular más humedad. Si no tienes ropa suficiente para la colada tienes dos opciones: utilizar un ciclo rápido o dejarlas colgadas en el tendedero hasta que acumules la suficiente.
Continuando con la humedad, si queremos eliminar este olor tan desagradable de nuestras toallas podemos usar un chorro de amoniaco diluido con el detergente. Y a la hora de utilizar un suavizante optar por una taza pequeña de vinagre en el cajetín. Además, no utilizando suavizante harás que sean más absorbentes. El vinagre también nos será útil para eliminar las pelusas de las toallas nuevas.
A la hora de organizar la ropa de baño, almacena las toallas en paquetes. Dos toallas grandes, dos toallas medianas y una para el lavabo es un buen ejemplo para una casa donde viven dos personas, pero siempre está por delante las necesidades de cada uno.
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